Esa "cosa" es lo que hace cantar al tomeguín del pinar

lunes, 23 de febrero de 2015

Llueve sobre lo mojado





La estera? rota
Por Elsie Carbó
grillosazules@gmail.com

No es una frase carente de sentido o trillada, en este caso me sirve para ilustrar lo que ocurre en muchas salas de recuperación de la salud de  los policlínicos de la capital, a las cuales el abandono o la falta de interés de los encargados en darle mantenimiento a los equipos, las tienen a media capacidad, aunque debiera decirse funcionando gracias a la dedicación y el encargo del personal técnico asignado.

No hace muchos meses publique en este blog lo que estaba ocurriendo en algunas salas de fisioterapia y recuperación, más conocidas por gimnasios, que el Ministerio de Salud Pública instala en áreas especiales de policlínicos u hospitales, para quienes bajo prescripción médica lo necesiten.

El gimnasio del policlínico 19 de abril, me sirvió de ejemplo, en la Avenida Tulipán, fue el que utilicé para explicar la situación que existe con los aparatos y equipos dedicados a estos menesteres, aunque no es el único, también está el de Plaza, catalogado de institución insignia, con una serie de méritos y diplomas por su desempeño en la salud, pero que  a pesar de lo necesario que resultan sus aparatos en los gimnasios tratar determinadas dolencias físicas y rehabilitaciones generales, permanecen rotos y cuando los arreglan, es tan deficiente el mantenimiento que le aplican que solo dan servicio unas pocas semanas.



Las bicicletas?, rotas

!El vibrador? Roto!
Así ocurrió en el 19 de abril. Su arreglo después de permanecer mucho tiempo sin funcionar fue un simple maquillaje con duración de dos meses, para volver a caer en el paro total. En unos son las bicicletas estáticas, en otros esteras o caminadoras, y en general a veces faltan o están deteriorados los colchones, también las báscula para chequear el peso de los pacientes, equipos imprescindibles a la hora de recibir el tratamiento en un gimnasio.

Y esto es una pena porque las áreas dedicadas a la rehabilitación son espacios adecuados, amplios y ventilados, que disponen de  apoyos y servicios de un personal capacitado para tratar distintas afecciones, que van desde la rehabilitación general hasta el registro de malestares específicos, bien por stress, demasiado peso corporal o achaques por edad.



En todos el cuidado y atención de estos pacientes está a cargo de un team de especialistas y fisioterapeutas que se encargan de aquellos pacientes que requieren una aplicación personificada, esmero y profesionalismo hay cada uno de ellos cotidianamente desde las ocho de la mañana, que es la hora en que llegan los primeros pacientes, sin embargo, no pueden sentirse satisfechos si no cuentan con los equipos y los soportes vitales de aparatos destinados a complementar los tratamientos.

Muchos, como dije anteriormente y ahora lo repito, no están funcionando o están fuera de servicio debido a desperfectos técnicos, pero si preguntas nadie sabe las razones por las que los expertos o el personal capacitado no vienen a arreglarlos, y cuando vienen, la alegría dura poco, como ocurrió con la estera, las bicicletas y el el vibrador en el 19 de abril, cuestión de unos meses y de nuevo en paro total.

Desde las ocho de la mañana comienzan a llegar para recibir tratamientos, el promedio excede las cien visitas diarias en este gimnasio que es atendido por unos seis especialistas
Y fíjense que estamos hablando de una afluencia diaria de más de 100 personas a estas salas, gente de la tercera edad en su mayoría, pero también jóvenes y niños que necesitan fisioterapia, que para eso el centro cuenta con más de seis especialistas muy bien capacitados.

Contar con un local como estos, que con ese destino se han incorporado en la dinámica hospitalaria, forma parte de la recuperación de la salud y se ha convertido ya es una necesidad impostergable para la vida de los enfermos, por qué entonces permanecen rotos, sin mantenimiento o abandonados?

Nadie podría decir que están clausurados o prohibidos, no, esa no es la palabra, pero qué sentido tiene que algo exista si no se puede usar?, Creo que para adorno las flores.

Hacer ejercicio es vital para la salud, forma parte de los slogan que escuchamos a diario en la tele, solo que no se entiende el desinterés que tienen ciertos responsables ante la desidia que concurre en algunos gimnasios.

Quiero puntualizar que quienes asistimos a estos gimnasio en la comunidad lo agradecemos y lo apreciamos de corazón, porque de lo que se trata es de recobrar la salud, y eso no tiene precio, sobretodo en épocas donde cada vez estas actividades se cuentapropistas y se encarecen más.

No es propaganda trasnochada afirmar que muy pocos países cuentan con tales patrocinios gratuitos para los ciudadanos aquejados de diferentes dolencias, y, lo digo porque conozco a muchos extranjeros que hablan de lo caro que cuesta, no digamos un tratamiento de fisioterapia, sino un simple masaje corporal, me pregunto entonces, estamos dándole a las salas de recuperación el uso para lo que verdaderamente fueron creadas por Salud Pública? Hasta ahí los dejo, cualquier opinión tienen mi correo al inicio.