Elsie Carbó
He visto Santa y Andrés. Ya raras veces una producción cubana me perturba
considerablemente teniendo como punto de enfoque que ya he visto bastante de
eso. Tal vez a ese aspecto de la realidad se referiría Obama en su visita a la
Isla cuando dijo que habría que olvidar el pasado, pero no sé, algo en ese
momento me resultó un poco perplejo, no obstante mirando la cinta de Carlos
Lechuga, la cual no se ha puesto en los cines del país, pienso que de olvido
nada, perdón sí, como decía mi abuela, y ahí están los trozos de aquel escenario
que mi generación reconoce muy bien y que por más que se quiera engavetar
resurge de sus cenizas como un Fénix inagotable.
En Cumanayagua una tía mía le tiró wevos a mí otra tía que
estaba a punto de zarpar para el Mariel con su hija exilada. Ambas se
reencontraron años después en Miami. Dicen que ninguna de las dos habló del
pasado, quizás lo habrían olvidado, me cuesta creerlo después de meterme en la
piel de Andrés y vivir su calvario, casi uno igual al que sufrió mi primo Luis
en los remates del pueblo, y a otros que conocí aquí en la capital y también la
pasaron mal, escapando al destierro para no morir quemados en la hoguera, y aún
así siempre la candela les tocó el fondillo, recuerdo las escenas de Julito
Cabrera siendo arrastrado por la marea turbulenta de aquella grandiosa arenga
frente al Payret, o la de Juan Carlos Martínez cuando en aquella reunión del
colectivo de Juventud Rebelde, en los talleres de linotipo, fue escarmentado públicamente al
descubrirse que era gay. Borrón y olvido para tanto dolor, como dijo aquel presidente? Si al principio lo dudé hoy
me niego rotundamente a olvidar la historia, aunque a veces la vida me lleve a
confraternizar en el cederre con la misma persona que aquella vez, representando
al sindicato, gritó con ahínco paredón para los gusanos maricones.
La cinta ahora circula en el paquete, pero a mi nieta esta
película solo le traerá interrogantes, ella no sabe nada, tampoco podrá creer
lo que narra. Son girones de nuestra pasada historia. Podría decirle
que solo se trata de un guión intrascendente de ficción entre Altunaga y
Carlos?. Pero creo que es verdad, está censurada.
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